Acabo de recibir una canción en francés que me ha puesto los pelos de punta. El artista se llama Imbert, es un chico raro, viste de cuero, lleva cresta y toca el contrabajo. Su estilo es bastante extraño, pero he de reconocer que me gusta mucho esta canción misteriosa que me ha llegado de manos de Anne Marie, una chica encantadora con la cual hice las prácticas d'équine. De padre uruguayo y madre francesa, residente en París pero estudiante de veterinaria en Bélgica.
Espero que os impacte tanto como a mí.
sábado, 24 de mayo de 2008
martes, 20 de mayo de 2008
Los Apocalyptica en versión femenina
Increíble!. Los que conocéis a Apocalyptica os va a sonar a chino esto, en realidad lo único que tienen en coún es que usan instrumentos clásicos...y en este caso ni eso porque son violines y cello eléctricos!!! en fin...aquí lo dejo...creo que merece la pena conocerlas.
domingo, 18 de mayo de 2008
La cosa va de Amy's
Aquí os dejo dos grandes canciones de Amy Mcdonald y Amy Winehouse...espero que las disfrutéis!!. Un poquillo de música para alegrarnos la vida.
Song lyrics | Mr Rock N Roll lyrics
Song lyrics | Back To Black lyrics
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Song lyrics | Back To Black lyrics
lunes, 12 de mayo de 2008
Viaje a través de los Alpes (I): Lyon-Ginebra-Lausanne
Aquí comienza mi aventura de 4 días hacia Suiza, a visitarla y a ver a Ysus.
Salí el jueves a eso de las 3 de Lyon, y todo fue normal hasta Ginebra...salvo que nunca imaginé que durante el trayecto me quedara embabiada con el paisaje que se extendía ante mí (lo grabé y todo! es que era preciosísimo...disculpad el pulso, lo de grabar con el vaivén del tren no es lo mío ;)).
En Ginebra cambié de tren para enganchar con otro que me llevara a Lausanne, la ciudad en la que vive Ysus.
Aquí os dejo un mapita con los diferentes cantones de Suiza y las situaciones de las ciudades que visitaréis con nosotros, a través de este pequeño recopilatorio virtual.
Lo dicho, que estaba yo en Ginebra para cambiar de tren y tuve que pasar por la aduana, que en un principio pensé que había otro camino, pero no: OBLIGATORIAMENTE, así que...buah, qué chorrada, ni me miraron, debo tener cara de no poner bombas y eso ;).
De camino a Lausanne en tren...bueno, no puedo describiros lo bonito que es aquello, de verdad, hay tanto color verde que asusta, las montañas son enormes (a ver, son los Alpes) y el viaje es de lo más agradable porque discurre a las orillas del lago Léman. Cuando llegué allí Ysus estaba para recogerme así que...decidimos que aunque llevaba la mochila conmigo que aprovecharíamos el día para ir a ver el lago y ya de paso el Parque olímpico. Y así fue. Caminamos a la orilla del lago, pasamos por el puerto (y aproveché para hacer unas fotillos a los veleritos y a los catamaranes, madre mía lo que hubiera disfrutado mi padre con estas cosas!). Cuando llegamos al final del camino, nos pusios en la orilla, a tirar piedrecillas para ver si botaban sobre el agua; Ysus decidió que era buena idea descalzarse y mojar los pinrreles en el Lago, yo no lo imité, pero también me senté a la orilla. Allí había una parejilla, bastante maja, que se había llevado hasta una cachimba para fumar 8qué bien se lo monta la gente coño).
Salimos de allí camino del parque olímpico, y allí nos topamos con un parque de niños, y nos columpiamos!!! buah, hacía tanto tiempo que no jugaba a ser niña que casi ni me acordaba!. Continuamos camino a través del bosquecillo (porque allí no son parques, no no, son bosques, qué de verde!) y e dediqué a leer los carteles, algunos de ellos curiosos, como el de prohibido tener los perros sueltos en la época de verano (no te jode, en invierno quién va a bajar a pasar frío con los niños!). En el parque olímpico hay algunas cosillas graciosas, como las referencias de los récords mundiales de salto de pértiga, lanzaiento de peso (cómo pesan las putas bolas esas, y parece que no eh? pero en la tele lo hacen tan fácil que uno piensa que están lanzando una bolita de papel) y el de altura. Hay estatuas de grandes corredores y también una columna en la que están escritos todos los juegos olímpicos desde que se iniciaron.
Salimos de allí, ya era tarde, y cogimos el autobús, o más bien el trolebus, que...bueno, estas cosas e resultan curiosas, porque allí llevan otro trolebus remolcado. Compras el billete y te lo guardas, ni lo enseñas (a no ser que el revisor te lo pida) y cuando el trole se para, das al botón, abres la puerta y pasas por donde quieras, no hace falta ni verle la cara al conductor!!.
Allí se habla francés, auqnue yo en el autobús oía de todo, inglés, alemán, español, algún italiano y árabe...joder! alguien da más!. Llegamos a casa de Ysus, un apartamentito de 30 metros cuadrados, con suelo de parqué y muy acogedor la verdad. Preparamos la cena y a dormir se dijo. Cómo cansa viajar madre!.
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Salí el jueves a eso de las 3 de Lyon, y todo fue normal hasta Ginebra...salvo que nunca imaginé que durante el trayecto me quedara embabiada con el paisaje que se extendía ante mí (lo grabé y todo! es que era preciosísimo...disculpad el pulso, lo de grabar con el vaivén del tren no es lo mío ;)).
En Ginebra cambié de tren para enganchar con otro que me llevara a Lausanne, la ciudad en la que vive Ysus.
Aquí os dejo un mapita con los diferentes cantones de Suiza y las situaciones de las ciudades que visitaréis con nosotros, a través de este pequeño recopilatorio virtual.
Lo dicho, que estaba yo en Ginebra para cambiar de tren y tuve que pasar por la aduana, que en un principio pensé que había otro camino, pero no: OBLIGATORIAMENTE, así que...buah, qué chorrada, ni me miraron, debo tener cara de no poner bombas y eso ;).
De camino a Lausanne en tren...bueno, no puedo describiros lo bonito que es aquello, de verdad, hay tanto color verde que asusta, las montañas son enormes (a ver, son los Alpes) y el viaje es de lo más agradable porque discurre a las orillas del lago Léman. Cuando llegué allí Ysus estaba para recogerme así que...decidimos que aunque llevaba la mochila conmigo que aprovecharíamos el día para ir a ver el lago y ya de paso el Parque olímpico. Y así fue. Caminamos a la orilla del lago, pasamos por el puerto (y aproveché para hacer unas fotillos a los veleritos y a los catamaranes, madre mía lo que hubiera disfrutado mi padre con estas cosas!). Cuando llegamos al final del camino, nos pusios en la orilla, a tirar piedrecillas para ver si botaban sobre el agua; Ysus decidió que era buena idea descalzarse y mojar los pinrreles en el Lago, yo no lo imité, pero también me senté a la orilla. Allí había una parejilla, bastante maja, que se había llevado hasta una cachimba para fumar 8qué bien se lo monta la gente coño).
Salimos de allí camino del parque olímpico, y allí nos topamos con un parque de niños, y nos columpiamos!!! buah, hacía tanto tiempo que no jugaba a ser niña que casi ni me acordaba!. Continuamos camino a través del bosquecillo (porque allí no son parques, no no, son bosques, qué de verde!) y e dediqué a leer los carteles, algunos de ellos curiosos, como el de prohibido tener los perros sueltos en la época de verano (no te jode, en invierno quién va a bajar a pasar frío con los niños!). En el parque olímpico hay algunas cosillas graciosas, como las referencias de los récords mundiales de salto de pértiga, lanzaiento de peso (cómo pesan las putas bolas esas, y parece que no eh? pero en la tele lo hacen tan fácil que uno piensa que están lanzando una bolita de papel) y el de altura. Hay estatuas de grandes corredores y también una columna en la que están escritos todos los juegos olímpicos desde que se iniciaron.
Salimos de allí, ya era tarde, y cogimos el autobús, o más bien el trolebus, que...bueno, estas cosas e resultan curiosas, porque allí llevan otro trolebus remolcado. Compras el billete y te lo guardas, ni lo enseñas (a no ser que el revisor te lo pida) y cuando el trole se para, das al botón, abres la puerta y pasas por donde quieras, no hace falta ni verle la cara al conductor!!.
Allí se habla francés, auqnue yo en el autobús oía de todo, inglés, alemán, español, algún italiano y árabe...joder! alguien da más!. Llegamos a casa de Ysus, un apartamentito de 30 metros cuadrados, con suelo de parqué y muy acogedor la verdad. Preparamos la cena y a dormir se dijo. Cómo cansa viajar madre!.
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Viaje a través de los Alpes (II): Lausanne
El viernes, dado que Ysus trabajaba, decidí irme con él hasta el trabajo, dejarlo allí y comenzar mi tour por esta bella ciudad (y no exenta de cuestas, infinitas y empinadas (y odiosas) cuestas: y lo dice una que es de Toledo eh?). Bajamos en bus desde casa de Ysus hasta el banco, pues yo debía cambiar de euros a francos para no perder demasiado dinero con el "redondeo a la super-alza" de los suizos. Cual no fue nuestra sorpresa que el banco abrí a las 9:30 y aún no habían dado ni las 9!. Fuimos desde la plaza de St. François hasta su trabajo y yo comencé a hacer fotillos. as primeras las dediqué a una pequeña iglesia al lado del curro de Ysus, que según me dijo él, daban la misa en alemán (aquí le doy la razón a Rocío, si ya una misa es coñazo, oirla en alemán es peor que una muerte a pellizcos!).
Aproveché y llamé a is padres, para hacer hora hasta las 9:30 y cambiar los benditos euros. Trabajo conseguido...comienza el tour por Lausanne. Ya que estaba delante de la Iglesia de St. François pues la dediqué unas fotillos y entré en ella. Ya es de destacar que la puerta de la iglesia sea enoorme, pero además no hace falta ni tocarla, se abre solita cuando estás delante!. Al entrar decidí grabar un video ya que en esos momentos se hallaba un buen hombre tocando el órgano y claro, demasiado tentador para no grabarlo.
A la salida, me senté en la placita y pensé cuál sería el recorrido que haría. Y voilà, a llevarlo a la práctica. Desde St. François llegué a una placita intermedia antes de llegar a la catedral, donde había una fuente un tanto extraña (juzgarla vosotros mismo!!). La catedral estaba en obras, por lo que no pude entrar, pero me dediqué a darme la vuelta entera, era muy chula. Descubrí una bonita callejuela que e llevaba hasta la "Calle de atrás " (la rue d'arrière") y a un precioso sitio donde aproveché para tomar un café (Il Ghiotto)y a hacer una fotillo a las nuevas monedas y billetes ;) (tranquila Ido, te he guardado unas cuentas para tu colección). La señora fue un encanto y me ayudó a decidir qué visitar y en qué orden. De ahí me dirigí al castillo de Lausanne, con su magnífico reloj de sol (las 10:17 eran)y una estatua de un tío famoso (al cual no conozco) con una curiosa frase "Mi muerte es util a mi país". Bajé por la la avenida de la universidad hasta la plaza de Riponne, donde se haya un edificio enoorme super chulo (y que además, es la plaza de los yonkis, pero son yonkis suizos como dice Ysus, no hacen nada, ni siquiera molestar). De allí, me dirigí hacia la "Torre", que nada más que es una torre, con un edificio transpantojado enfrente y ya está. Pero es chula ;).
En esos momentos ya había visitado todo lo importante y como debía solucionar el problema de la luz del apartamento de Ysus (antes de que se me cayeran las córneas por los rayos de sol incidentes sobre mi delicada retina a primera hora de la mañana) me pasé por el centro comercial a comprar tijeras, cinta aislante negra y tiras de velcro blanco...y cartulina negra, pero esa la compré en una papelería a la cual llegué gracias a las explicaciones de una amable señora.
A las 12:30 me hayaba en la plaza del oso, porque había quedado con Ysus para comer en un restaurante de comida africana...curioso cuanto menos, como veréis en la foto, se come con las manos, se trata de coger un poco de pan (especial) y con él coger-pellizcar la comida (el resto se hace como en todos los países: masticar y tragar).
Tras esto, Ysus siguió camino hacia el curro y yo a hacer manualidades a casa ;). Me heché la siesta y a las 6 menos diez me acerqué al curro a por Ysus, visitamos el parque "Mi reposo" y de ahí decidimos qué hacer hasta la hora de cenar.
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Aproveché y llamé a is padres, para hacer hora hasta las 9:30 y cambiar los benditos euros. Trabajo conseguido...comienza el tour por Lausanne. Ya que estaba delante de la Iglesia de St. François pues la dediqué unas fotillos y entré en ella. Ya es de destacar que la puerta de la iglesia sea enoorme, pero además no hace falta ni tocarla, se abre solita cuando estás delante!. Al entrar decidí grabar un video ya que en esos momentos se hallaba un buen hombre tocando el órgano y claro, demasiado tentador para no grabarlo.
A la salida, me senté en la placita y pensé cuál sería el recorrido que haría. Y voilà, a llevarlo a la práctica. Desde St. François llegué a una placita intermedia antes de llegar a la catedral, donde había una fuente un tanto extraña (juzgarla vosotros mismo!!). La catedral estaba en obras, por lo que no pude entrar, pero me dediqué a darme la vuelta entera, era muy chula. Descubrí una bonita callejuela que e llevaba hasta la "Calle de atrás " (la rue d'arrière") y a un precioso sitio donde aproveché para tomar un café (Il Ghiotto)y a hacer una fotillo a las nuevas monedas y billetes ;) (tranquila Ido, te he guardado unas cuentas para tu colección). La señora fue un encanto y me ayudó a decidir qué visitar y en qué orden. De ahí me dirigí al castillo de Lausanne, con su magnífico reloj de sol (las 10:17 eran)y una estatua de un tío famoso (al cual no conozco) con una curiosa frase "Mi muerte es util a mi país". Bajé por la la avenida de la universidad hasta la plaza de Riponne, donde se haya un edificio enoorme super chulo (y que además, es la plaza de los yonkis, pero son yonkis suizos como dice Ysus, no hacen nada, ni siquiera molestar). De allí, me dirigí hacia la "Torre", que nada más que es una torre, con un edificio transpantojado enfrente y ya está. Pero es chula ;).
En esos momentos ya había visitado todo lo importante y como debía solucionar el problema de la luz del apartamento de Ysus (antes de que se me cayeran las córneas por los rayos de sol incidentes sobre mi delicada retina a primera hora de la mañana) me pasé por el centro comercial a comprar tijeras, cinta aislante negra y tiras de velcro blanco...y cartulina negra, pero esa la compré en una papelería a la cual llegué gracias a las explicaciones de una amable señora.
A las 12:30 me hayaba en la plaza del oso, porque había quedado con Ysus para comer en un restaurante de comida africana...curioso cuanto menos, como veréis en la foto, se come con las manos, se trata de coger un poco de pan (especial) y con él coger-pellizcar la comida (el resto se hace como en todos los países: masticar y tragar).
Tras esto, Ysus siguió camino hacia el curro y yo a hacer manualidades a casa ;). Me heché la siesta y a las 6 menos diez me acerqué al curro a por Ysus, visitamos el parque "Mi reposo" y de ahí decidimos qué hacer hasta la hora de cenar.
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Viaje a través de los Alpes (III): Berna-Fribourg
La tercera jornada empezó tempranito. Queríamos visitar Berna (capital) y ya de paso...si nos sobraba tiempo Fribourg, que estaba en la línea del tren que habíamos tomado para ir a Berna.
Ysus me iba contando que Berna cierra a eso de las 5 de la tarde, que más allá de esa hora no queda ni Dios en las calles, que cierra todo y...bueno, el panorama que nos encontramos fue bastante distinto, ya que al ser sábado hay mercadillo en la plaza (por cierto, chulísimo, al final cargamos con unas bolsas de té, porque a ambos nos es irresistible el comprar algo, lo que sea, pero algo!y ya de paso nos acercamos a ver una fuente un tanto extraña: es coo musgo, parece que es una fuente orgánica...al estilo del nacimiento del río Mundo)y además había una carrera de 60kms que debía ser famosilla o algo, porque había (que nosotros viéramos en los dorsales) más de 22000 participantes y, para amenizar la velada, un grupo de rock en directo que tocaba canciones de los 70 y los 80. Ni que decir tiene que vimos de todo, gente muy muy major que hacía los 60 kms andando (rápido eso sí) y que nos baldaba a Ysus y a mí, y gente profesional; niños, mujeres, hombres, todo juntito, en amor y compañía. Visitamos un poco las calles principales (donde había vida, en definitiva) y pasamos por el banco nacional suizo, las innumerables torres con sus relojes, la catedral, los puentes, el río...(ale chic@s a ver las fotos, que sino no me cunde escribiendo). Curiosidades acerca de Berna pocas, pero una de ellas, que fue la que más me llamó la atención, fue el hecho de que decidieron dividir el río (con esclusas) para poder tener una especie de islilla en la mitad.
Paramos a comer en un restaurante en una de las calles principales, y cual fue nuestro asombro que no sabíamos en qué idioma hablar: alemán? francés? inglés?...al final hablé yo en francés porque Ysus sufrió un colapzo mental y cortocircuito de idiomas. Comimos fondue, bastante rica por cierto y mientras estábamos en ello veímos por la ventana como NO PARABA DE PASAR GENTE Y MÁS GENTE corriendo, aquello era increíble..y en esto que Ysus me dice...¿Has visto lo original que es la lámpara del bar?...pues no, pero ahora que lo dices: tres tenedores doblados que sostenían una tulipa y, de base, un plato dado la vuelta, no pude resistirme a hacer una foto, por Dios, las quiero para mi casa!. A todo esto, mientras comíamos, una señora muy mayor, aparece del brazo de otras dos. Se había perdido, supusimos que era Alzheimer y que estaban intentando saber de dónde venía. Total, el samur y la policía local allí con nosotros en el restaurante (hablando en alemán claro está, así que entre que Ysus se enteraba de la mitad y yo de nada...no supimos cómo terminaría la historia).
A la salida decidimos hechar a andar hacia la parte del río, con intención de ver un foso que tiene osos en su interior (la "mascota de berna" vaya). Y de camino: un grupo de rock en directo! ale, video al canto porque merecía la pena ;).
Al final llegamos a los de los osos, los vi y les hice unas fotillos (uno de ellos había sido sacrificado en Marzo, ponía que por problemas sanitarios, supongo que por una enfermedad o algo (eso quiero creer)). Y de ahí, jugándonos el pescuezo, cruzamos por donde venían corriendo y nos dirigimos a la orilla del río. Cainamos a su lado y cruzamos por un puentecillo que estaba habilitado para ello, pasamos al lado de un parque infantil donde,,,quiero ser niña de nuevo! joder, los niños tenían una montaña rusa para ellos! buah, y yo con 24 años y sin poder montar!. Después subimos, y digo bien, subimos-escalamos una escalera infinita y empinada como ella sola hasta la parte de arriba de la ciudad, ya en disposición de coger el tren e ir a Fribourg. Y de camino: un cochazo! (A ver quién me dice qué modelo es! jajaja).
Cuando llegamos allí, Ysus (que no se porqué lo hago caso) se perdió, porque decidió que su memoria funcionaba bien (falso)y...terminamos cogiendo el bus al centro porque sino nos veíamos en Albuquerque.
Fribourg es una ciudad muy medieval, de casitas bajas, de madera vista y...con un tremendo parecido a Cuenca, porque esta ciudad también tiene un "hoyo" (o "hueco" como lo llama Ysus) y unos precipicios que para qué. Recorrimos el centro y...fotos, foto, fotos. Quizá lo que más me llamó la atención fue la catedral, que llevaba en obras desde 1985 y no terminarán hasta el 2015!! en fin, esto es un proyecto de por vida y lo demás son tonterías.
Al final terminamos en un pequeño café-terraza al lado del puente de la ciudad, tomándonos un cafetillo y hablando de lo divino y lo humano. De vuelta, ya en la estación de tren, decidimos comernos una galleta que nos dieron en la competión (2500Kcal!) y Ysus se dedicó a hacer el cerdo con ella...ejem ejem...ved las fotos!!
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Ysus me iba contando que Berna cierra a eso de las 5 de la tarde, que más allá de esa hora no queda ni Dios en las calles, que cierra todo y...bueno, el panorama que nos encontramos fue bastante distinto, ya que al ser sábado hay mercadillo en la plaza (por cierto, chulísimo, al final cargamos con unas bolsas de té, porque a ambos nos es irresistible el comprar algo, lo que sea, pero algo!y ya de paso nos acercamos a ver una fuente un tanto extraña: es coo musgo, parece que es una fuente orgánica...al estilo del nacimiento del río Mundo)y además había una carrera de 60kms que debía ser famosilla o algo, porque había (que nosotros viéramos en los dorsales) más de 22000 participantes y, para amenizar la velada, un grupo de rock en directo que tocaba canciones de los 70 y los 80. Ni que decir tiene que vimos de todo, gente muy muy major que hacía los 60 kms andando (rápido eso sí) y que nos baldaba a Ysus y a mí, y gente profesional; niños, mujeres, hombres, todo juntito, en amor y compañía. Visitamos un poco las calles principales (donde había vida, en definitiva) y pasamos por el banco nacional suizo, las innumerables torres con sus relojes, la catedral, los puentes, el río...(ale chic@s a ver las fotos, que sino no me cunde escribiendo). Curiosidades acerca de Berna pocas, pero una de ellas, que fue la que más me llamó la atención, fue el hecho de que decidieron dividir el río (con esclusas) para poder tener una especie de islilla en la mitad.
Paramos a comer en un restaurante en una de las calles principales, y cual fue nuestro asombro que no sabíamos en qué idioma hablar: alemán? francés? inglés?...al final hablé yo en francés porque Ysus sufrió un colapzo mental y cortocircuito de idiomas. Comimos fondue, bastante rica por cierto y mientras estábamos en ello veímos por la ventana como NO PARABA DE PASAR GENTE Y MÁS GENTE corriendo, aquello era increíble..y en esto que Ysus me dice...¿Has visto lo original que es la lámpara del bar?...pues no, pero ahora que lo dices: tres tenedores doblados que sostenían una tulipa y, de base, un plato dado la vuelta, no pude resistirme a hacer una foto, por Dios, las quiero para mi casa!. A todo esto, mientras comíamos, una señora muy mayor, aparece del brazo de otras dos. Se había perdido, supusimos que era Alzheimer y que estaban intentando saber de dónde venía. Total, el samur y la policía local allí con nosotros en el restaurante (hablando en alemán claro está, así que entre que Ysus se enteraba de la mitad y yo de nada...no supimos cómo terminaría la historia).
A la salida decidimos hechar a andar hacia la parte del río, con intención de ver un foso que tiene osos en su interior (la "mascota de berna" vaya). Y de camino: un grupo de rock en directo! ale, video al canto porque merecía la pena ;).
Al final llegamos a los de los osos, los vi y les hice unas fotillos (uno de ellos había sido sacrificado en Marzo, ponía que por problemas sanitarios, supongo que por una enfermedad o algo (eso quiero creer)). Y de ahí, jugándonos el pescuezo, cruzamos por donde venían corriendo y nos dirigimos a la orilla del río. Cainamos a su lado y cruzamos por un puentecillo que estaba habilitado para ello, pasamos al lado de un parque infantil donde,,,quiero ser niña de nuevo! joder, los niños tenían una montaña rusa para ellos! buah, y yo con 24 años y sin poder montar!. Después subimos, y digo bien, subimos-escalamos una escalera infinita y empinada como ella sola hasta la parte de arriba de la ciudad, ya en disposición de coger el tren e ir a Fribourg. Y de camino: un cochazo! (A ver quién me dice qué modelo es! jajaja).
Cuando llegamos allí, Ysus (que no se porqué lo hago caso) se perdió, porque decidió que su memoria funcionaba bien (falso)y...terminamos cogiendo el bus al centro porque sino nos veíamos en Albuquerque.
Fribourg es una ciudad muy medieval, de casitas bajas, de madera vista y...con un tremendo parecido a Cuenca, porque esta ciudad también tiene un "hoyo" (o "hueco" como lo llama Ysus) y unos precipicios que para qué. Recorrimos el centro y...fotos, foto, fotos. Quizá lo que más me llamó la atención fue la catedral, que llevaba en obras desde 1985 y no terminarán hasta el 2015!! en fin, esto es un proyecto de por vida y lo demás son tonterías.
Al final terminamos en un pequeño café-terraza al lado del puente de la ciudad, tomándonos un cafetillo y hablando de lo divino y lo humano. De vuelta, ya en la estación de tren, decidimos comernos una galleta que nos dieron en la competión (2500Kcal!) y Ysus se dedicó a hacer el cerdo con ella...ejem ejem...ved las fotos!!
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Viaje a través de los Alpes (IV): Sion-St. Léonard-Montreux
El cuarto día comenzó tan temprano como el tercero. Esta vez el viaje fue orientado a ver uno de los lagos subterráneos más bonitos (y el más largo de Europa) sito en St Léonard, en uno de los pueblecitos de la parte más pegada a Italia (cantón inferior del mapa de "Suiza (I)"; está en la parte más a la derecha, un poquito de geografía Suiza!, a la derecha de Sion).
Todo empezó por un libro de ofertas de viaje que cayó en nuestras manos el día anterior, y que ciertamente ninguno sabíamos que existía...la foto nos llamó la atención, el precio también...así pues nos pusimos rumbo a St Léonard. Para ello debíamos cambiar de tren en Sion, la ciudad más próxima (y tanto: 5 minutos en tren!). Allí nos tomamos un cafetillo y un bollo (esta vez hablaban en Italiano...).Al llegar allí nos sorprendimos, porque literalmente estábamos en mitad de los Alpes, al más puro estilo de Heidi, y gracias a Dios que nos encontramos con una amable chica que nos indicó cómo ir hasta el Lago.
El Lac-souterrain estaba como a un kilómetro de distancia de la parada del tren. Al llegar, descubrimos un pequeño sitio, con un barecillo y una pequeña tienda en la cual compramos las entradas. Nos dijeron de esperar 10 minutos a la siguiente visita y así hicimos.
Había bastante gente, pese a estar en un recóndito lugar, entre ellas sudamericanos y japos (que estos últimos están en todos los lados). Uno de los niños sudamericano se entetuvo un poco tirando los vasos a la basura mientras su familia iba a ponerse a la cola, y cual no sería la desesperación del niño que gritó un angustiado "Espérenme". Por supuesto nos reímos, ya que la familia no lo iba a dejar allí abandonado y se encontraba a menos de 10 pasos de él.
Descendimos por una empinadísima escalera y llegamos a nivel del agua, ahí fue donde nos pusimos el jersey pues la cueva estaba a bastante menos temperatura y además caían gotas de agua filtradas de las rocas desde el techo. Nos ayudaron a meternos en las barcas y alehop! el guía nos preguntó que en qué idioma nos hablaba y...alemán, francés, inglés (toma ya! casi se me olvidaba que estábamos en Suiza!). Nos contaba, a la vez que remaba, la profundidad del lago, a qué temperatura estaba el agua, las subvenciones que habían recibido y el cómo fue descubierto. En realidad yo lo tenía de fondo, pues me hallaba absorta en una borágine fotográfica digna del más famoso de los fotógrafos, pues...¿cómo sacar fotos en un sitio que apenas está iluminado? y lo mejor de todo: ¿porqué la cámara no carpta lo que mis ojos ven?. En definitiva, que tras sacar unas 40 fotos, válidas son solo unas pocas (probé de todo eh? con flash, sin flash, modo noche...).
La visita sólo duró 30 minutos, por lo que teníamos toodo el día para visitar más cosillas. Tras salir, nos paramos en la tienda y compré unas postales, por eso de no irme sin una buena foto de allí (qué frustración!).
Decidimos que lo mejor sería ir a Montreux y visitar el "Château de Chillon", situado en la orillita del Lago Léman (en la misma orilla que Lausanne pero mucho ás lejos claro). Así pues, esperamos al tren y nos bajamos en Montreux, hechamos a andar hasta la orilla y JAJAJA había una especie de muñecos hechos de plantas, que una vez cerca, me doy cuenta de que son los personajes de "Ice Age"!. Andamos por la orilla, esquivando gente y apareció ante nosotros una estatua, que convenientemente Ysus me dijo que era Freddy Mercury. Sí, como lo oís, resulta que le han homenageado así porque él grababa parte de sus canciones en mitad de las montañas y le gustaba mucho Montreux, de forma que los últimos meses de vida los pasó allí. Tb vi dos Ferrari negros, a cada cual más bonito (parece que el viaje me ha brindado la oportunidad de evaluar el mercado de coches de lujo!).
Tras el impacto de la nueva noticia (por mi) de esta parte de la vida de Mercury continuamos por la orilla hasta pararnos en un pequeño embarcadero, más alejado de la gente que antes, donde comenzamos a comernos los fantásticos bocadillos de tortilla francesa con jamón y queso que prudentemente habíamos hecho por la mañana. Yo me deleitaba con el paisaje mientras Ysus compartía su bocata con dos amistosos patos que nadaban por allí (ciertamente no se quién se aprovechaba de quién). Fuamnado me hallaba cuando una divertida familia se paró en el embarcadero de al lado, y cual fue mi sorpresa que iban acompañados de dos perros labradores a los cuales les lanzaban al agua un palo, y ellos, contentísimos, se lanzaban a por él para traérselo de nuevo a la orilla.
Tras el receso continuamos andando hasta el castillo. Allí, la que escribe, se volvió a cebar a hacer fotos (las podéis ver directamente, hablan por sí solas). Después...coo el día barruntaba (y olía) a lluvia, cogimos el tren hasta Lausanne. Nos tocó esperar 50 minutos, por lo que yo me puse a hacer sudokus en lo alto de una escalera y Ysus a hacer más fotos (de todo lo que se movía (animales que volaban, nadaban o simplemente andaban por allí) y del paisaje), hasta que vino y me dijo que le quitara la cámara que sino era un peligro.
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De camino a Lausanne hablamos poco, nos vino el bajón del cansancio. Caminito de casa. Nos esperaba una tarde al más puro estilo de domingo: sofá y peli. Le puse la peli de "Mimzy: más allá de la imaginación", pero me dormí casi al final (qué siesta más rica madre!). Después a cenar (en abundancia, todo se ha de decir) nos vimos otra peli: "Fracture" de Antonie Jopkins, que a Ysus le flipó ;).
A dormir se dijo, que al día siguiente volvía a la horrible rutina. Abandonaba Suiza...
Volveré, de eso no me cabe duda. Os aconsejo que la visitéis.
Todo empezó por un libro de ofertas de viaje que cayó en nuestras manos el día anterior, y que ciertamente ninguno sabíamos que existía...la foto nos llamó la atención, el precio también...así pues nos pusimos rumbo a St Léonard. Para ello debíamos cambiar de tren en Sion, la ciudad más próxima (y tanto: 5 minutos en tren!). Allí nos tomamos un cafetillo y un bollo (esta vez hablaban en Italiano...).Al llegar allí nos sorprendimos, porque literalmente estábamos en mitad de los Alpes, al más puro estilo de Heidi, y gracias a Dios que nos encontramos con una amable chica que nos indicó cómo ir hasta el Lago.
El Lac-souterrain estaba como a un kilómetro de distancia de la parada del tren. Al llegar, descubrimos un pequeño sitio, con un barecillo y una pequeña tienda en la cual compramos las entradas. Nos dijeron de esperar 10 minutos a la siguiente visita y así hicimos.
Había bastante gente, pese a estar en un recóndito lugar, entre ellas sudamericanos y japos (que estos últimos están en todos los lados). Uno de los niños sudamericano se entetuvo un poco tirando los vasos a la basura mientras su familia iba a ponerse a la cola, y cual no sería la desesperación del niño que gritó un angustiado "Espérenme". Por supuesto nos reímos, ya que la familia no lo iba a dejar allí abandonado y se encontraba a menos de 10 pasos de él.
Descendimos por una empinadísima escalera y llegamos a nivel del agua, ahí fue donde nos pusimos el jersey pues la cueva estaba a bastante menos temperatura y además caían gotas de agua filtradas de las rocas desde el techo. Nos ayudaron a meternos en las barcas y alehop! el guía nos preguntó que en qué idioma nos hablaba y...alemán, francés, inglés (toma ya! casi se me olvidaba que estábamos en Suiza!). Nos contaba, a la vez que remaba, la profundidad del lago, a qué temperatura estaba el agua, las subvenciones que habían recibido y el cómo fue descubierto. En realidad yo lo tenía de fondo, pues me hallaba absorta en una borágine fotográfica digna del más famoso de los fotógrafos, pues...¿cómo sacar fotos en un sitio que apenas está iluminado? y lo mejor de todo: ¿porqué la cámara no carpta lo que mis ojos ven?. En definitiva, que tras sacar unas 40 fotos, válidas son solo unas pocas (probé de todo eh? con flash, sin flash, modo noche...).
La visita sólo duró 30 minutos, por lo que teníamos toodo el día para visitar más cosillas. Tras salir, nos paramos en la tienda y compré unas postales, por eso de no irme sin una buena foto de allí (qué frustración!).
Decidimos que lo mejor sería ir a Montreux y visitar el "Château de Chillon", situado en la orillita del Lago Léman (en la misma orilla que Lausanne pero mucho ás lejos claro). Así pues, esperamos al tren y nos bajamos en Montreux, hechamos a andar hasta la orilla y JAJAJA había una especie de muñecos hechos de plantas, que una vez cerca, me doy cuenta de que son los personajes de "Ice Age"!. Andamos por la orilla, esquivando gente y apareció ante nosotros una estatua, que convenientemente Ysus me dijo que era Freddy Mercury. Sí, como lo oís, resulta que le han homenageado así porque él grababa parte de sus canciones en mitad de las montañas y le gustaba mucho Montreux, de forma que los últimos meses de vida los pasó allí. Tb vi dos Ferrari negros, a cada cual más bonito (parece que el viaje me ha brindado la oportunidad de evaluar el mercado de coches de lujo!).
Tras el impacto de la nueva noticia (por mi) de esta parte de la vida de Mercury continuamos por la orilla hasta pararnos en un pequeño embarcadero, más alejado de la gente que antes, donde comenzamos a comernos los fantásticos bocadillos de tortilla francesa con jamón y queso que prudentemente habíamos hecho por la mañana. Yo me deleitaba con el paisaje mientras Ysus compartía su bocata con dos amistosos patos que nadaban por allí (ciertamente no se quién se aprovechaba de quién). Fuamnado me hallaba cuando una divertida familia se paró en el embarcadero de al lado, y cual fue mi sorpresa que iban acompañados de dos perros labradores a los cuales les lanzaban al agua un palo, y ellos, contentísimos, se lanzaban a por él para traérselo de nuevo a la orilla.
Tras el receso continuamos andando hasta el castillo. Allí, la que escribe, se volvió a cebar a hacer fotos (las podéis ver directamente, hablan por sí solas). Después...coo el día barruntaba (y olía) a lluvia, cogimos el tren hasta Lausanne. Nos tocó esperar 50 minutos, por lo que yo me puse a hacer sudokus en lo alto de una escalera y Ysus a hacer más fotos (de todo lo que se movía (animales que volaban, nadaban o simplemente andaban por allí) y del paisaje), hasta que vino y me dijo que le quitara la cámara que sino era un peligro.
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De camino a Lausanne hablamos poco, nos vino el bajón del cansancio. Caminito de casa. Nos esperaba una tarde al más puro estilo de domingo: sofá y peli. Le puse la peli de "Mimzy: más allá de la imaginación", pero me dormí casi al final (qué siesta más rica madre!). Después a cenar (en abundancia, todo se ha de decir) nos vimos otra peli: "Fracture" de Antonie Jopkins, que a Ysus le flipó ;).
A dormir se dijo, que al día siguiente volvía a la horrible rutina. Abandonaba Suiza...
Volveré, de eso no me cabe duda. Os aconsejo que la visitéis.
miércoles, 7 de mayo de 2008
Tras la tempestad, siempre llega la calma
Buenas a todos: POR FIN HE TERMINADO LOS EXÁMENES DE TERCER AÑO!!!
No os podéis ni imaginar las ganas que tenía, por fin descansaré un poco (aunque no sin cierto nerviosismo, ya que la semana próxima, el martes, saldrán las notas. Espero no llevarme malas sorpresas y sólo hacer un pequeño "rattrapage" dentro de dos semanitas!).
Hoy, a la salida del examen de reproducción, he acompañado a Pablo a Lyon porque me hacía ilusión hablar y socializar en español y porque me debía acercar a Part Dieu a comprar una cosilla y ya de paso sacar dinerillo porque...ME VOY A LAUSANNE (SUIZA) A VER A YSUS Y A DISFRUTAR DE MIS POQUÍSIMOS DÍAS DE VACACIONES antes de volver a esta anodina rutina de clases, exámenes y prácticas inútiles.
Pablo me ha invitado a comer en su casa, y después nos hemos tomado "la sobremesa" tranquilamente en compañía de un cafetito y un zumo en una de las terrazas de Part Dieu.
Mientras estaba en su casa me ha enseñado una de las mejores fricadas que he visto en mucho tiempo, se trata de una página en la cual anotas los números de serie y la identificación de los billetes de euro que llegan a tus manos y así puedes ver por quién pasan y a qué países viajan! así pues...me he enganchado a esta nueva fricada, pues guardo la esperanza de que en algún momento haya alguien que toque el mismo billete que yo toqué y me alegre saber que efectivamente "el dinero va de mano en mano" y no se queda en alguna casa escondido esperando tristemente a que alguien lo eche de menos o decida gastarlo!.
Para aquellos que sois realmente frikis.... ESTA ESTA ES VUESTRA PÁGINA!!:
http://www.eurobilltracker.com/?referer=127371
Es una aventura que me gustaría vivir con vosotros, ya me diréis si os gusta o no...es absolutamente increíble ;)
ABRAN MESA SEÑORES!!
No os podéis ni imaginar las ganas que tenía, por fin descansaré un poco (aunque no sin cierto nerviosismo, ya que la semana próxima, el martes, saldrán las notas. Espero no llevarme malas sorpresas y sólo hacer un pequeño "rattrapage" dentro de dos semanitas!).
Hoy, a la salida del examen de reproducción, he acompañado a Pablo a Lyon porque me hacía ilusión hablar y socializar en español y porque me debía acercar a Part Dieu a comprar una cosilla y ya de paso sacar dinerillo porque...ME VOY A LAUSANNE (SUIZA) A VER A YSUS Y A DISFRUTAR DE MIS POQUÍSIMOS DÍAS DE VACACIONES antes de volver a esta anodina rutina de clases, exámenes y prácticas inútiles.
Pablo me ha invitado a comer en su casa, y después nos hemos tomado "la sobremesa" tranquilamente en compañía de un cafetito y un zumo en una de las terrazas de Part Dieu.
Mientras estaba en su casa me ha enseñado una de las mejores fricadas que he visto en mucho tiempo, se trata de una página en la cual anotas los números de serie y la identificación de los billetes de euro que llegan a tus manos y así puedes ver por quién pasan y a qué países viajan! así pues...me he enganchado a esta nueva fricada, pues guardo la esperanza de que en algún momento haya alguien que toque el mismo billete que yo toqué y me alegre saber que efectivamente "el dinero va de mano en mano" y no se queda en alguna casa escondido esperando tristemente a que alguien lo eche de menos o decida gastarlo!.
Para aquellos que sois realmente frikis.... ESTA ESTA ES VUESTRA PÁGINA!!:
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Es una aventura que me gustaría vivir con vosotros, ya me diréis si os gusta o no...es absolutamente increíble ;)
ABRAN MESA SEÑORES!!
lunes, 5 de mayo de 2008
Un día muy triste
Acabo de recibir una noticia muy triste. Muchu, el perro del que cuidamos Rocío y yo y que tanta alegría y sentido dio a nuestras vidas aquí, ha tenido que ser sacrificado.
Aquejado de continuos dolores de estómago y con problemas digestivos-neurovegetativos no demasiado fáciles de diagnosticar, cayó en una anorexia que, sin duda, lo haría morir de inanición.
Su dueña, que ha hecho todo lo posible por salvarlo vio en la eutanasia era la única manera de acabar con el sufrimiento de Muchu. No dudo ni por un momento que la decisión haya sido verdaderamente difícil, pues era su fiel compañero, su amigo y una parte de ella.
Esto ha sido un mazazo a mi pequeño y frío corazón. Un corazón que ha tenido que ir endureciéndose para poder dar paso a una mentalidad fría y científica que no deja cabida para los sentimientos ni la ética del cariño. Quizá yo haría lo mismo con Galita, mi fiel compañera y la de mi familia, porque antes que verla sufrir prefiero pasar por un auténtico calvario y saber que, en la medida de lo que me ha sido posible, he aliviado el futuro sufrimiento. Pero eso es la dicotomía del veterinario.
Siempre a caballo entre el cariño y la devoción por los animales, y la practicidad analgésica de la ciencia. Recibir una noticia así no hace más que poner en tela de juicio hasta qué punto somos científicos y hasta qué punto dejamos de ser personas. Me gustaría decir que podía haberlo salvado, haber hallado la respuesta a sus problemas y poner solución. Pero no ha sido así. Y para su dueña tapoco. He preguntado siempre que me ha sido posible por el estado de Muchu, y las noticias no auguraban nada bueno: "no sabemos lo que tiene", "continúa adelgazando porque se niega a comer"...
Tal vez Muchu estaba triste porque no tenía miedo a morir, porque los animales no temen a la muerte, simplemente buscan un lugar tranquilo donde depositar sus huesos y dejar que la naturaleza haga el resto, dejar que su existencia quede en el recuerdo, que su dueño encuentre un nuevo compañero de aventuras.
Pero lo cierto es, y ellos no lo saben, que una parte de ellos sigue viviendo en el interior de sus dueños, bien sea como un recuerdo alegre o como una total impotencia de no haber hallado la solución a su problema, más aún si el dueño es veterinario. ("He estudiado medicina veterinaria y soy incapaz de salvar a mi propio amigo de las garras de la muerte" o bien, y en eso quiero creer: "Estudiaré más a fondo, para evitar que algún dueño pierda a su compañero de fatigas").
Muchu, cielo, espero que donde vayas siempre lleves la felicidad de tus vivos ojos, tus saltos y tus carreras. Y que nunca te olvides de que aquí siempre te querremos. RIP.
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