viernes, 29 de febrero de 2008

Mi lado más tierno


Bien que las cosas no me van nada mal en Francia, aún no he conseguido ser yo misma del todo, no se si porque no me puedo expresar como es debido, no se si porque los franceses me parecen fríos y distantes (sí, como lo oís, la dama de hielo dice esto, imagináos como han de ser...) o porque realmente echo de menos a los míos.


La gente que más me falta es aquella, que pese a no estar pegada a mí las 24 horas, siempre ha estado cercana; no nos vemos en un mes, pero me recibe con un abrazo y un "¿Qué tal?"; nunca han sido mis mejores amigos, pero ahora es cuando los valoro en su justa medida .


Ahora estoy más sensible a los que me rodean, valoro más los abrazos y los gestos de cariño, me agrada tener a alguien a mi lado, por el mero hecho de no sentirme desamparada en esta sociedad que me es tan extraña, tan inhumana, tan...francesa. Mi único compañero de habitación es un peluche del burro de winnie the pooh, al que en cierta manera lo he tomado cariño, porque le he dotado, dentro de lo que la imaginación me permite, de sentimientos y espítu. No me habla, pero como si lo hiciera. No me dice "¿Qué tal?", pero en cierto modo lo hace. No es mi mejor amigo, pero he aprendido a valorarlo en su justa medida.

Te queremos (,) Muchu..


Tranquilos chaval@s que vuelvo a la carga!!

En esta ocasión os hablaré de mis dos compañer@s de andanzas: Rocío y Muchu. No son comparables, dado que Rocío es una personita y Muchu un Border collie cuya dueña se ha ido de prácticas a Marruecos y nos lo ha dejado durante, nada más y nada menos, que 15 días!!

Deciros que ellos me han traído muchos y muy buenos momentos; Rocío porque es mi apoyo en este lugar dejado de la mano de Dios, y con la que puedo comunicarme como es debido (esto es, en Español!), hacer bromas, reirme, contarle mi vida y mis andanzas, contarme ella las suyas... Y Muchu porque nos ha dado a ambas las mejores risas de todas.

De Rocío poco he de decir aparte de que es una bellísima persona: no muy alta pero con carisma, siempre con una sonrisa que dedicarte, "gracioza" y con salero, cocinillas y mujer de su casa, trabajadora hasta decir basta, buena amiga y compañera, pero sobretodo, bella persona. En definitiva: un solete.

Muchu...a éste hay que echarle de comer aparte. Es encantador, en el más amplio y fiel sentido. De mirada tranquila, orejas expresivas, ágil y valiente, obediente (a veces), jugador de tenis empedernido y bestia como él solo: si hay un palo de 2 metros y 20 kilos en 60 metros a la redonda...allá que va! lo coge, y el muy burro, aunque se parta el cuello de cargar con él, te lo trae, no tengo muy claro si con la intención de que se lo lances (??) o para demostrarte lo fuerte que es (?????). Posee un rasgo caracerístico que lo dota de aptitud casi humana: cuando tu le haces carantoñas, en tono normal, te gira la cabeza a un lado como diciéndote "no se en qué idioma me hablas" o "no tengo demasiado claro que es lo que me estás queriendo decir, pero...tira la pelota!!".

Todas las noches nos reunimos las tres españolas (Rocío, Bea y yo) y la chilena (Patricia) para sacar a Muchu de paseo. No me equivoco demasiado si os digo que es el mejor momento del día. Hablamos de lo que hemos hecho en el día, qué nos parecen los franceses, cómo echamos de menos a nuestra gente...y además, nos reímos con Muchu, porque éste, ajeno a la cotidianidad de nuestras vidas, disfruta al máximo con su pelota de tenis y su paseo nocturno.

A veces me gustaría ser perro. Te queremos (,) Muchu!!